jueves, 16 de julio de 2009

¿Liderazgo en todas las estructuras de tu vida?

Lic. Víctor Hugo Granados Cervantes

No cabe duda que el liderazgo ha sido una característica que nos ha definido como seres humanos y que nos seguirá determinando ya sea en la sociedad como en aspectos particulares. La pregunta es si es que podemos liderear nuestra existencia en todos los ámbitos de la vida o sólo en aquellos factores como el empleo, por la remuneración, o la política, por el sentido de poder, se puede enfocar el “liderazgo”. La pregunta quizá nos podría llevar al análisis de personajes como Nelson Mandela con sus divorcios en su vida familiar o a Juan Pablo Segundo lidereando una iglesia con una carga muy fuerte a sus espaldas. Quizá podamos partir del hecho que se presenta en las empresas “exitosas”, donde dicho éxito viene acompañado de una carga laboral inmensa y desprovista de una vida familiar y mucho menos social. O de un liderazgo en otra actividad humana como el deporte o el espectáculo. Podemos tomar una cantante y analizar “su liderazgo” y tener un parámetro para saber si es líder en todos los ámbitos de su vida.
La pregunta parte para saber si es posible “equilibrar” nuestra vida o nuestra emociones en muchos de los sentidos de cómo la estamos llevando. Como lo manifiesta el cambio de paradigmas de Khun, éste cambio es manifiesto en muchas de las esferas de nuestro pensamiento y por ende de nuestra vida. En los años de la Roma clásica qué podría importar si el líder era compasivo, tolerante; lo importante es que salvara al imperio de la amenaza bárbara y punto. Podemos señalar otra época u otra manifestación del ser humano, no lo haré. Me importa analizar y regresar a la pregunta en cuestión: ¿Puedo liderear mi vida en todos los sentidos o solamente se enfoca a un ámbito como el trabajo? Porque la pregunta implica lo social, lo emocional, lo familiar y todo enfoque que quiera uno darle. En este aspecto es donde entra el cambio de paradigma y su análisis. El líder desde qué punto se presenta: el de la máscara, desde el aspecto social o puede llegar a presentarse desde la vulnerabilidad y reconocer sus heridas y sus defectos. Quizá es en esta parte donde no se han hecho estudios profundos: qué pasa con el líder que manifiesta sus emociones, si es que hay líderes que lo hagan. La emoción es una manifestación humana que incluye una necesidad detrás de las misma, ya sea resuelta o no. Es en esta emoción en la que el líder es depositario de la confianza del equipo, del grupo y tal vez de la misma direccionalidad de lo que quieres alcanzar. Es por esto que quizá el nuevo tipo de líder sea aquel que pueda manifestar su emoción o emociones a sus seguidores desde una autenticidad, desde la congruencia… quizá desde la hérida. Sólo desde este aspecto entonces podemos hablar de un líder en todos los aspectos o ámbitos de nuestra vida. Porque nuestro paradigma del líder ha cambiado y por que la sociedad requiere de este tipo de líderes. Si no es así seguirá siendo un líder que se presente desde la máscara, desde la superficialidad, desde la vaciedad con el único interés de tener o dominar, nunca con el fin de su propia esencia y la de los seguidores
Como conclusión puedo manifestar que el nuevo liderazgo del siglo XXI es un liderazgo que incluye a sus emociones y las necesidades tanto propias como las de sus seguidores. Esto es apenas un esbozo de lo que se está perfilando en el nuevo tipo de sociedades de multimedia, es el inicio de marcos de referencia mucho más amplios de lo que nuestra expectativa contempla. Porque un análisis más riguroso nos conlleva a pensar que si la sociedad está cambiando es porque sus integrantes ya lo han hecho; y ahora, en ese entorno social, se está manifestando como un paradigma ya prersente.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario